El 2013 será uno de los años más interesantes en la política colombiana. Quizás es el año pre electoral, más electoral de las historia de Colombia. El motivo es sencillo, la presencia del líder más admirado de Colombia, Álvaro Uribe Vélez. Nunca en la historia del país y quizás en el mundo un ex presidente vuelva a la arena política con tanta fuerza y reconocimiento del país, después de 8 años de ejercicio eficiente y valeroso. Sus seguidores, que se cuentan por millones, estamos a la expectativa de cuál va a ser el papel de Uribe en las contiendas al senado y quien va a ser el uribista que correrá por la presidencia de Colombia. Se especula que encabezará una lista cerrada al congreso, una opción maravillosa que abrirá un debate político para alquilar balcón.
La propuesta del uribismo es clara, recuperar el rumbo perdido. En el 2010 se eligió la continuidad de la Seguridad Democrática, Cohesión Social, y Confianza Inversionista. Banderas políticas abandonadas y traicionadas por el gobierno actual.
No es oponerse a las políticas del actual gobierno, es proponer salidas viables, sacarlo de este laberinto en que se encuentra, para que el país vuelva al camino de una prosperidad verdadera. El uribismo propone una paz duradera, justa y confiable, se basa en la seguridad para vivir, para trabajar, para la educación, para la familia, para avanzar en infraestructura; como magistralmente lo expone el aspirante a la presidencia Óscar Iván Zuluaga. No podemos negociar con terroristas ni comprometer a nuestras Fuerzas Militares a una derrota humillante e injusta. El uribismo acude y alienta el dialogo constructivo con la ciudadanía y todos los sectores representativos del país.
En el 2014 se dará la verdadera oportunidad de una renovación política que pide el país. Llegará una nueva generación inspirada en grandes plataformas políticas que le han dado a la ciudadanía un futuro prometedor. Los caciques clientelistas que hoy están llenos de mermelada del gobierno de Santos se les terminó su ciclo en el senado de la república. En cambio las juventudes y líderes regionales comprometidos con la patria acompañarán a Álvaro Uribe en una contienda por el futuro de los colombianos, con un proyecto que será amplio, participativo e incluyente.
La contienda electoral comienza en forma, es la oportunidad para que los colombianos nos organicemos, defendamos las banderas políticas que queremos nos gobiernen a partir del 2014, ya que en este cuatrienio nuestra voluntad fue burlada. Entendimos que no podemos confiar en un gobierno mentiroso, canalla, traicionero y cínico como el de Santos. El Centro Democrático le abre las puertas a todos los colombianos que se identifican con sus políticas y que están dispuestos a trabajar honestamente y con lealtad a los principios y políticas que transformaron el país, expuestas y lideradas por Álvaro Uribe Vélez.
Publicado en Revista Posición, Enero 25, 2013
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