Un espacio donde se discutirá sobre temas políticos Colombianos e internacionales, buscando mas participación ciudadana y crear conciencia para un mejor futuro.

viernes, 18 de febrero de 2011

La Importancia del Libre Comercio


La historia del comercio entre naciones tuvo su gran apogeo en el siglo XVI, XVII y principios del XVIII con el llamado periodo del mercantilismo. Las influencias de grandes pensadores como Adam Smith quien argumentaba la importancia de que un gobierno participe en comercio con otras naciones para su desarrollo económico.  Muchas de esas contribuciones para el libre comercio quedaron plasmadas en su libro “La Riqueza de las Naciones”.
Sin embargo, fue hasta el final de la segunda guerra mundial cuando los Estados Unidos decidieron establecer el llamado BRETTON WOODS SYSTEM, con su más notable arquitecto el economista británico John Maynard Keynes, quien vio la importancia de un balance de los intereses de las naciones y la necesidad de la estabilidad de la economía internacional.
BRETTON WOOD SYSTEM  estaba basado en tres pilares. El primero el cual estaba manejado principalmente por el Banco Mundial era el desarrollo económico. El segundo, la estabilidad monetaria manejado por el Fondo Monetario Internacional. Finalmente, el tercer pilar era el Comercio donde se creo Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT) que luego fue rediseñado y se convertiría en el hoy llamado Organización Mundial de Comercio (OMC).
Sin lugar a dudas el Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio fue un salto importante para el comercio internacional basado en la reducción de tarifas, un proceso que estaba basado en los principios de reciprocidad, no discriminación y multilateralismo.
Basado en estos principios se lograron múltiples acuerdos internacionales no solo entre los Estado Unidos y naciones fuertes económicamente, sino también entre naciones emergentes que hoy muestran un crecimiento económico importante.
En Colombia se han negociado una cantidad importante de tratados de libre comercio en las últimas dos décadas, sin embargo a sido la ultima la más importante para Colombia en este tema. No solo por la negociación realizada con los Estados Unidos por un tratado de libre comercio, sino por la firma con otros países de la región y el interés por crear más de estos tratados con países asiáticos y con la misma comunidad europea.
El tratado de libre comercio con Estados Unidos sigue a la espera de la ratificación por el congreso Americano. Pero tiene que ser Colombia quien debe seguir impulsando esta idea, pues será un beneficio mayor para los comerciantes e industriales colombianos, como para miles de familias que se beneficiarían por este intercambio comercial. Sin embargo, ante la negativa de la administración de Obama de someter el proyecto a votación del congreso; el nuevo gobierno de Colombia no debe tomar la decisión de no esperar su ratificación y desistir en este tratado con la excusa que Colombia no puede arrodillarse ante los Estados Unidos.  Obrar así es darle gusto a sistemas retrógrados y poco exitosos.
Es totalmente cierto que Colombia debe buscar nuevos mercados, pero siempre se ha tenido una fuerte relación con los Estados Unidos y así como Chile duro más de 10 años en su negociación para la ratificación del tratado entre estas dos naciones, Colombia  debe insistir y debe seguir empujando la aprobación del TLC, con la mayor economía del mundo.  
A partir del año 2002, Colombia, entro en un periodo de transformación económica que ha traído éxitos sin precedentes, y hoy es una nación atractiva para la inversión extranjera. Todo esto gracias a políticas por parte de un gobierno que mostró transparencia en momentos de implementar técnicas para abrir el mercado. Ese legado que le ha dado crecimiento económico a nuestra nación tiene que defenderse y hoy mas que nunca debe existir un pronunciamiento sin amenazas por parte del gobierno nacional para luchar por la ratificación del tratado de libre mercado con los Estados Unidos.
Debemos los colombianos recordarle a los Estados Unidos que el ideal de libre comercio y de abrir mercados buscando una estabilidad económica mundial, es un principio adoptado, por un sano capitalismo. Ellos son  la gran potencia económica y se requiere cooperar con otras naciones amigas para un crecimiento sostenido de la economía.  La reciprocidad, no discriminación y multilateralismo han sido principios defendidos día a día por grandes organismos económicos mundiales y Colombia tiene que ser líder mundial en defensa de estos principios para poder pasar de una economía emergente a tener una economía sostenida con símbolos positivos.

lunes, 7 de febrero de 2011

SE PIERDE LA HERENCIA

Cuentan que cuando Cristo agonizaba, exclamo
 –Perdónalos porque no saben lo que hacen!
El ladrón a su  lado entre confuso y preocupado, contesto. – Señor!  Si saben lo que pasa es que se están haciendo los pendejos!

Tal parece que el Presidente Santos, con su “nuevo mejor amigo” le paso lo mismo, se hizo el pendejo y así se quedo. Unos dicen que se doblego para que pagaran la deuda a los comerciantes. Pero nada de eso sucedió. Hasta le pidió perdón por el bombardeo en Ecuador. O por su interés en ejercer un liderazgo regional, donde todos sabemos que para hacerlo se requiere carácter, y de eso pocón, pocón.
Porque el gobierno no nos explica de una vez por todas en que consistió ese misterioso pacto en Santa Marta donde se entrego todo a cambio de nada?
Hoy las noticias del periódico EL TIEMPO, no dejan de ser desconcertantes y  preocupantes;  nuestros vecinos están tolerando abiertamente la presencia guerrillera en las fronteras; en el Ecuador, las emisoras invitan a sus jóvenes a engrosar las filas de las Farc, que decir de la denuncia abierta realizada por SALUD HERNANDEZ-MORA, que realiza una investigación profunda de la frontera con Venezuela y detecta la presencia de auxiliadores y colaboradores del gobierno Venezolano con los grupos terroristas Colombianos.
En el mismo periódico se muestra el resurgimiento de la más dañina embajadora de las FARC, dedicada durante ocho años a mentir y atacar a un gobierno que persiguió sin descanso ni cuartel a sus amigotes terroristas. La falta de una Justicia que tiene el ojo izquierdo cerrado, y solo persigue a los amigos de Uribe, ha permitido el resurgimiento de su grupo de colombianos por las Farc.
Este gobierno, negocio las valerosas denuncias de Álvaro Uribe ante la OEA y a toda la comunidad Internacional sobre la presencia de las FARC en los clubes de veraneo de Venezuela, con gráficos, coordenadas y fotografías;  donde mostró la guerrilla colombiana disfrutando y compartiendo con la Guardia Nacional Venezolana. Este gobierno ha puesto en duda que esto hubiese ocurrido, habla de las supuesta presencia militar guerrillera. No le importo que la oposición y la poca prensa independiente venezolana  lo alertara. Parece hacernos creer que es mejor una diplomacia meliflua y floja a otra con dignidad, honor y principios que heredo del anterior gobierno, pero que a nuestro camaleón presidente le produce urticaria.
Negocio la estadía de los militares y asesores Norte Americanos en Colombia por serle molesto al chafarote del lado. Y este cobarde acto, mereció el reconocimiento de los países vecinos conocedores de la presencia guerrillera en las fronteras, incluyendo al Brasil de Lula. Cree que con los ojos cerrados y su idílica inocencia podrá detener a un dictador con ínfulas expansionistas. Con semejante soberbia, se distancio del único país que nos ha ayudado en la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico. En un acto de arrogancia innecesario, manda una delegación de tercera comandada por el vicepresidente ha abogar por el tratado de libre comercio, o para ampliar las preferencias arancelarias con nuestro mayor comprador y socio comercial.
Se nos dijo que mejoraría la seguridad reforzándola en las ciudades; lo que vemos en estos seis nefastos meses es que vuelven las tomas guerrilleras, matan inocentes militares y policías, matan sindicalistas y estudiantes por igual, la justicia deja en libertad a los testaferros de la guerrilla, vuelven los desplazamientos forzosos.
Peor aún es reconocer que solo van seis meses y ya retrocedimos a los tiempos palaciegos imperiales con recepciones, viajes al exterior,  pompas y vanidades; tiempos aquellos de nuestro inolvidable Andrés Pastrana.

JUAN DAVID VELEZ
FEBRERO 7, 2011